El prestigioso certamen de belleza internacional ha rediseñado o simplemente sustituido varias veces la joya más importante de sus reinas.
La joya ha sufrido drásticos cambios.
Las modas cambian con el paso del tiempo y las coronas no se quedan atrás… al menos en Miss Universe. El prestigioso certamen de belleza internacional ha rediseñado o simplemente sustituido varias veces la joya más importante de sus reinas. Puerto Rico, con sus cinco triunfos en el concurso, forma parte de esa metamorfosis.
1952: La primera corona de Miss Universe fue estrenada por la finlandesa Armi Kuusela cuando ganó la primera edición del certamen. La pieza perteneció originalmente a la dinastía Romanov, siendo usada por la emperatriz Alexandra cuando contrajo nupcias en 1894 con Nicolás II de Rusia. Está confeccionada en plata y tiene el interior cubierto por terciopelo. Desde su cruz en el tope hasta las seis filas que bajan y se encuentran con dos horizontales, la corona está llena de diamantes. Actualmente se encuentra en el Hillwood Museum, en Washington, D.C.
1953: Para su segunda edición, el concurso decidió cambiar de corona. La organización optó por una de bronce con apariencia más futurística. Sin embargo, este codiciado accesorio sólo fue utilizado por una reina: la francesa Christiane Martel.
1954-1960: Se le conoce como la "Estrella del Universo". Montada en un marco platino y dorado con mil perlas cultivadas en el Oriente y varias negras, la corona brillaba tanto que supuestamente costaba medio millón de dólares. Se dice que muchas de las ostentadoras sólo podían ponérsela un par de veces -perseguidas por guardaespaldas- durante su reinado. La primera que la portó fue la estadounidense Miriam Stevenson, mientras que su compatriota Linda Bement concluyó el uso oficial de esta lujosa pieza
1961-1962: Hubo otro cambio de corona. Mantuvieron el diseño de estrella céntrica, pero utilizaron -por primera vez- rhinestones. La joya solo fue cargada por dos reinas: la alemana Marlene Schmidt y la argentina Norma Nolan.
1963-1969: Comenzó la era de quizás la corona más famosa del certamen. En rhinestones, la joya incluyó el símbolo de Miss Universe con la forma de una mujer sosteniendo un cetro. La estrenó la brasileña Ieda María Vargas. Luego fue rediseñada varias veces.
1970-1973: La pieza fue rediseñada y se le añadió una especie de ala adicional en el centro. Esta nueva versión fue utilizada inicialmente por Marisol Malaret, la primera puertorriqueña en alcanzar el título de Miss Universe.
1974-2001: Surgieron versiones más modernas de la misma corona. Comenzó a usarla la española Amparo Muñoz. En esta etapa de coronas se integraron las puertorrriqueñas Deborah Carthy-Deu (1985), Dayanara Torres (1993) y Denise Quiñones, quien fue la última que en usarla.
2002-2007: Arrancó una nueva etapa con la corona Mikimoto. Estaba valorada en $250 mil y parecía tener forma de seis plumas de pavo real, cada una rellena de perla. Paula Shugart, presidenta de la organización, llegó a revelar que la joya cambió porque las reinas se quejaban de que la anterior era pesada y parecía una lámpara chandelier. La vimos por primera vez cuando Denise Quiñones se la puso a la rusa Oxana Fedorova, quien terminó renunciando y cediéndosela a la panameña Justine Pasek. En el siguiente orden, la corona pasó por las cabezas de la dominicana Amelia Vega, la australiana Jennifer Hawkins, la canadiense Natalie Glebova, la boricua Zuleyka Rivera y la japonesa Riyo Mori.
2008: Volvió a cambiar cuando el certamen se celebró en Vietnam, puesto que el país sede quería presentar una nueva versión de la corona que fuera muy simbólica de su cultura. Allí, la venezolana Dayana Mendoza se elevó con la joya, cuyo oro y mil piedras preciosas le daban un valor estimado en $120 mil. Simbolizaba fe, esperanza, unidad, buena fortuna e inspiración. Durante este año, la reina llegó a usar igualmente la Mikimoto, pero casi no la utilizaba porque era muy delicada y su reparación resultaba costosa.
2009-2014: Diamond Nexus Lab comenzó este año a trabajar las coronas del concurso, por lo que diseñaron tres coronas que pasaron por el cedazo del voto público. La audiencia descartó las joyas que simbolizaban la esperanza y la unidad para elegir entonces la pieza que hasta el día de hoy representa la paz. El accesorio, confeccionado con diamantes, oro blanco y platino, fue estrenado por la venezolana Stefanía Fernández. Integra rubíes sintéticos en representación de la lucha contra el VIH/Sida que ha asumido la organización de Miss Universe.
2015: La colombiana Paulina Vega estrenó una corona que recrea los rascacielos de Nueva York, hogar de Miss Universe. La pieza está valorada en $300,000. Presenta cinco grandes topacios color azul claro como símbolo de fortaleza y lealtad. Con una base de oro blanco de 18 quilates, la joya integra 311 pequeños diamantes y 198 zafiros color azul oscuro para representar fe y sabiduría. La colombiana Ariadna Gutiérrez pensó que ostentaría la corona tras ser anunciada erróneamente como ganadora, título que recayó sobre la filipina Pia Wurtzbach.