Cuando se cierne la tristeza, cinco metáforas ayudan a que se reanuden los aspectos positivos.
El optimismo no tóxico implica ser consciente de la situación negativa y buscar notar los aspectos positivos.
Las formas de orientarse hacia una perspectiva positiva pueden usarse en situaciones de largo y corto plazo.
Metáforas como agua salada y extracción de gemas abordan métodos para diluir las dificultades y buscar brillo.
Las dificultades y los acontecimientos negativos son parte de la vida. Puede que no estemos a cargo de que ocurra un evento trágico, una dificultad o una desgracia, pero podemos lograr un afrontamiento efectivo que permita un equilibrio entre aceptación y cambio. Cuando la negatividad es de alta proporcionalidad, sigue siendo prominente; cuando el equilibrio entre lo positivo y lo negativo es más moderado, lo negativo puede volverse menos notorio.
Acercarnos a nosotros mismos y a las situaciones de manera más positiva puede ayudar a disminuir el dolor de la tristeza y la angustia. Sin embargo, la solución no es suprimir todas las emociones negativas o invalidar la experiencia. Este último enfoque se ha asociado con la noción de optimismo tóxico que puede conducir a falta de autenticidad, frustración y menor bienestar.
En lugar del tipo de intervenciones de “pensar sólo pensamientos felices” o “mirar el lado positivo”, las investigaciones muestran que permitir lo negativo, y al mismo tiempo atraer algo positivo, es mucho más efectivo. Hay varias metáforas que permiten explorar formas de aplicar esta mentalidad a diferentes situaciones.
Un vaso de agua salada
Si tuviéramos un vaso de agua salada y nos pidieran que bebiéramos, podríamos considerarlo bastante desagradable. Es posible que queramos quitarle la sal para que quede más apetecible, pero esto no es fácil de hacer si la sal se ha disuelto en el agua. Sin embargo, si tomamos ese vaso de agua salada y lo diluimos en un recipiente de agua de 5 galones, la salinidad está mucho menos presente. De manera similar, en la vida, es posible que no podamos eliminar algunos de los eventos pasados negativos o situaciones problemáticas (la sal), pero cuanto más positivos podamos agregar a nuestra vida (el agua), menos nos concentraremos solo en lo negativo. Encontrar formas de mejorar la vida avanzando hacia la felicidad, la alegría, la satisfacción y la paz es una parte fundamental de la resiliencia y del ser humano.
Una cucharada de yogur
Muchas personas tienen traumas y adversidades en su entorno. Por mucho que nos gustaría poder olvidar estos acontecimientos, sabemos que, en general, esto no es realista. Sin embargo, podemos ayudar en el proceso de añadir a la vida más acontecimientos alentadores o interpretaciones más afirmativas que poco a poco empezarán a debilitar la intensidad de las experiencias desagradables. Así como agregar una cucharada de yogur (o cualquier producto a base de lácteos, como crema agria o aderezo) puede atenuar la comida picante y muy condimentada, agregar algunos aspectos positivos también puede atenuar las experiencias negativas de la vida. Una actividad recreativa divertida, un nuevo amigo o una nueva forma de interpretar una decepción pueden ayudar a suavizar algo que se ha vuelto demasiado intenso. Tomar unas vacaciones muy esperadas, redecorar una habitación o mudarse a un trabajo mejor puede ser como cambiar el sabor de una situación que se ha vuelto amarga o complicada. El proceso de diluir las dificultades deliberada y decididamente permite que nuestros sentidos permanezcan preparados para nuevos gustos de la vida.
Minería de gemas
Hay momentos en que las circunstancias llevan a muchos días oscuros, sucios y pegajosos, y esto realmente apesta. En medio de la oscuridad, sin embargo, a veces también podemos encontrar pequeños destellos dorados. Como buscar gemas en el lecho de un río fangoso, tenemos que estar atentos al más mínimo destello de brillo que nos permita saber que podría haber algo valioso que agarrar. En tiempos difíciles, la mayoría de las circunstancias de la vida pueden seguir siendo confusas, complejas y difíciles por un tiempo, pero encontrar una manera de buscar momentos de consuelo puede ayudar. ¿Podemos observar pájaros bonitos desde la ventana, disfrutar de una comida increíble o encontrar un vídeo divertido? Pequeños destellos no conducen inmediata o espontáneamente a que todo se resuelva, sin embargo, agregar algunos pequeños momentos de paz puede brindar algo de consuelo momentáneo.
Date un descanso del autobús de la amargura
Tenemos absolutamente permitido sentirnos enojados, resentidos y celosos por haber tenido más desafíos u obstáculos que otros que conocemos, pero centrarnos únicamente en lo negativo nos lleva a menudo a reflexionar sobre comparaciones no constructivas. Puede que estemos en el autobús de la amargura por un tiempo, pero encontrar formas de tomar descansos en las paradas designadas ayudará a cambiar el enfoque, permitir algo de perspectiva y hacer una pausa muy necesaria. De hecho, algunos viajes de la vida son más agotadores y esto requiere aún más paradas de descanso a lo largo del camino.
(RECONOZCO QUE LO DEL ARCOIRIS SE ME HACE ES¨¨TÚPIDO, PERO BUENO...)
Encontrar un arcoiris
Cuando necesitamos un cambio rápido de perspectiva o de mentalidad en un momento difícil, participar en una actividad de atención plena para encontrar un arco iris (encontrar y nombrar al menos cinco objetos de colores distintos entre lo que tienes a la mano) puede romper el hechizo de la negatividad o la incomodidad, al menos durante unos instantes. Este compromiso alegre se puede utilizar en varios momentos de cinismo creciente, que van desde someterse a un procedimiento dental incómodo hasta esperar en una cola increíblemente larga cuando se tiene prisa. Prestar atención a colores agradables, naturalmente, no elimina toda la frustración, el estrés o la tristeza, pero puede distraer temporalmente y estimular un reinicio para volver a afrontar el trabajo de una manera nueva.
Preguntas para reflexionar:
¿Sientes fatiga o te abruma una situación negativa que podría necesitar un reinicio y un replanteamiento?
¿Puedes considerar una de las metáforas sugeridas como una forma de equilibrar mejor la validación de lo difícil y al mismo tiempo buscar algo más tranquilizador?
La próxima vez que te encuentres en un momento de frustración, ¿podrías probar la técnica de “encontrar el arco iris”?
https://www.psychologytoday.com/es/blog/optimismo-no-toxico